Llevo toda la vida con caballos cerca (o ansiando tenerlos cerca), pero nunca se está al completo sin la figura de un compañero perro.
¡Una de las mejores experiencias del mundo es estar en plena naturaleza, a caballo, con tu perro y a ser posible con más amigos: jinetes, caballos y perros con quien compartirlo!
Es increíble cómo se complementan y se hacen ‘manada’,. Uno se siente tan en contacto con la naturaleza en su compañía que el espíritu ¡VUELA!.
No hay mejor tratamiento psicológico que el de estar en su compañía y cuidarlos; por un lado la pura magia de montar a caballo y, por otro lado, la adoración sín limites y sin trabas de tu perro.
¿Raza? ¡Da lo mismo! ¿Qué tipo de perro es mejor? Cualquiera que pueda correr lo suficiente para mantener el ritmo del caballo y que no sea agresivo. Para evitar problemas, siempre mejor castrados, ¡pero nada más!.
Personalmente tengo tendencia por los perros ‘ovejeros’, o de pastor, como los gos d’atura, collies, o los ‘mil leches’. Perros de tamaño medio o medio-pequeños, de carácter independiente, valientes y que físicamente no inspiren miedo a otros transeúntes. Está claro que hay personas que tendrán miedo tanto de los caballos como de los perros, independientemente de su tamaño y carácter. A esas personas hay que respetarlas y, si hace falta, bajarse del caballo y llevar a ambos (caballo y perro) de la mano hasta salir de la zona transitada.